Mayo 18 de 2022
Avanzar en la fe para ver la promesa
Josué 15:20-32
20 Esta, pues, es la heredad de la tribu de los
hijos de Judá por sus familias. 21 Y fueron las ciudades
de la tribu de los hijos de Judá en el extremo sur, hacia la frontera de Edom:
Cabseel, Edar, Jagur, 22 Cina, Dimona, Adada, 23 Cedes, Hazor, Itnán, 24 Zif,
Telem, Bealot, 25 Hazor-hadata, Queriot,
Hezrón (que es Hazor), 26 Amam, Sema, Molada, 27 Hazar-gada, Hesmón, Bet-pelet, 28 Hazar-sual,
Beerseba, Bizotia, 29 Baala, Iim, Esem, 30 Eltolad, Quesil, Horma, 31 Siclag,
Madmana, Sansana, 32 Lebaot, Silhim, Aín y
Rimón; por todas veintinueve ciudades con sus aldeas.
Josué 15:20-32
20 Esta fue la tierra asignada a los clanes de la
tribu de Judá para que fuera su hogar.
21 Las ciudades de Judá situadas a lo largo de la
frontera con Edom, en el extremo sur eran: Cabseel, Edar, Jagur, 22 Cina,
Dimona, Adada, 23 Cedes, Hazor, Itnán, 24 Zif, Telem,
Bealot, 25 Hazor-hadata, Queriot-hezrón (también llamada
Hazor), 26 Amam, Sema, Molada, 27 Hazar-gada, Hesmón,
Bet-pelet, 28 Hazar-sual, Beerseba, Bizotia, 29 Baala, Iim,
Ezem, 30 Eltolad, Quesil, Horma, 31 Siclag, Madmana,
Sansana, 32 Lebaot, Silhim, Aín y Rimón; veintinueve ciudades con sus
aldeas vecinas.
Estimado lector:
En estos versículos se ve cumplida la promesa que Dios
le hizo a Abraham, que su descendencia heredaría las tierras de Canaán
La Fe está directamente relacionada con el creer. La
Biblia dice “Por la fe (creer) Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al
lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba”. “Pero
sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a
Dios “crea” que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. (Hebreos
11:6)
La mayoría de las personas no reciben las promesas
porque no creen. La incredulidad es el pecado más común que tiene el ser
humano, y el más castigado por Dios. La Biblia dice que Moisés envió 12 príncipes
para reconocer la tierra prometida y solo creyeron Josué y Caleb. Los otros 10
no creyeron y no recibieron la tierra. “Mas quiero recordaros, ya que una vez
lo habéis sabido, que el Señor, habiendo salvado al pueblo sacándolo de Egipto,
después destruyó a los que no creyeron” (Judas 1.5)
La incredulidad lleva a la rebeldía. La fe (creer)
lleva a la obediencia. De hecho, las equivocaciones, malas decisiones y
fracasos son el producto de no creer. Cuando no se cree es muestra de que el
corazón está más lleno de pesimismo que de optimismo.
Para hallar disciplina en avanzar en la fe, nuestra
mente y cuerpo físico deben ser sometidos a sacrificios. Debemos ejercitar
nuestra fe. La fe de hoy debe ser mayor que la de ayer.
La Biblia nos dice que debemos ser inocentes como un
niño, es decir creer en todo lo que les dicen sea bueno o sea malo. Hoy la
invitación es a que ejercites el creer. Cree en tus hermanos, cree en tus
amigos, cree en tus líderes, cree en los pastores, cree en las personas. ¡solo cree
y veras la gloria de Dios!
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”