Junio 13 de 2025
CUANDO EL ENEMIGO OFRECE LO QUE NO LE PERTENECE
MATEO 4:8-11
8 Luego el diablo lo
llevó a la cima de una montaña muy alta y le mostró todos los reinos del mundo
y la gloria que hay en ellos.
9 —Te daré todo
esto—dijo—si te arrodillas y me adoras.
10 —Vete
de aquí, Satanás—le dijo Jesús—, porque las Escrituras dicen:
“Adora al Señor tu Dios
y sírvele únicamente a él”.
11 Entonces
el diablo se fue, y llegaron ángeles a cuidar a Jesús.
https://youtu.be/SoXyBHc1dqk?si=OVONxCzRx855BZN_
Estimado lector:
Este pasaje presenta una escena poderosa: Jesús, debilitado
por el ayuno, enfrenta una de las tentaciones más directas del diablo. En este
momento ya no hay sutilezas. Satanás ofrece “todos los reinos del mundo” a
cambio de algo que no debe ser objeto de negociación: la adoración.
La tentación apela al deseo de poder. El adversario ofrece
lo que ha usurpado, como si pudiera entregar la gloria sin el sufrimiento de la
cruz. Sin embargo, Jesús no cede. Su respuesta es clara y fundamentada en la
Palabra: “Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás”.
Esta escena revela una de las estrategias más comunes del
enemigo: ofrecer una "corona sin cruz", una salida fácil que evita el
camino difícil de la obediencia. A cambio, exige lo más valioso: la fidelidad a
Dios.
El episodio recuerda que la tentación siempre se presenta
con una voz seductora. No obstante, como Jesús lo demostró, es posible resistir.
La obediencia puede no ser cómoda, pero es el camino que honra a Dios. Y cuando
se elige ese camino, el enemigo se retira y la ayuda celestial se hace
presente. Dios no abandona a quienes permanecen fieles, incluso en
medio de la prueba.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”