¡¡¡NO ES TANTO SABER, SINO PONER EN PRÁCTICA!!!

Mayo 29 de 2025

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

 

¡¡¡NO ES TANTO SABER, SINO PONER EN PRÁCTICA!!!

 

MATEO 2:4-6

Mandó llamar a los principales sacerdotes y maestros de la ley religiosa y les preguntó:

—¿Dónde se supone que nacerá el Mesías?

—En Belén de Judea—le dijeron—porque eso es lo que escribió el profeta:

“Y tú, oh Belén, en la tierra de Judá,
    no eres la menor entre las ciudades reinantes de Judá,
porque de ti saldrá un gobernante
    que será el pastor de mi pueblo Israel”.

 

 

https://youtu.be/XBFwyAUc25U?si=rY-edkgjWG0vBA6E

 

Estimado lector:

 

La reacción de Herodes al enterarse del nacimiento del Mesías fue de temor y amenaza a su gobierno. Por eso, acudió a los principales sacerdotes y a los maestros de la ley religiosa, para averiguar dónde ocurriría lo que él consideraba un evento perturbador.

 

Aquellos sacerdotes y los eruditos de la ley respondieron enseguida y sin titubear, dónde sería el nacimiento, mencionando lo escrito por el profeta Miqueas a finales del siglo VIII antes de Cristo.

 

Este profeta menor hizo denuncias sociales sobre la corrupción en Judá e Israel; profetizó sobre la destrucción de Jerusalén y la restauración de Judá; y, también profetizó, que El Mesías nacería en Belén (Miqueas 5:2).

 

Quienes conocían la ley religiosa, tenían más endiosada a esta ley, que al mismo Dios que la dictó, y que además les instruía sobre eventos futuros. Y en lugar de estar preparados para la venida del Mesías y su accionar en la tierra, fueron los principales detractores de Él.

 

Como creyentes, no se trata solo de conocer la Palabra, sino de obtener, a través de ella, una actitud diferente en la vida, como testimonio de Su Reino, morando en quien le espera con ansias.

¡¡¡Estableciendo Su Reino!!!

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES