ALABANDO A DIOS

Abril 29 de 2025

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

 

ALABANDO A DIOS

 

SALMOS 146:1-10

¡Alabado sea el Señor!

Que todo lo que soy alabe al Señor.
    Alabaré al Señor mientras viva;
    cantaré alabanzas a mi Dios con el último aliento.

No pongan su confianza en los poderosos;
    no está allí la ayuda para ustedes.
Ellos, al dar su último suspiro, vuelven al polvo,
    y todos sus planes mueren con ellos.
Pero felices son los que tienen como ayudador al Dios de Israel,
    los que han puesto su esperanza en el Señor su Dios.
Él hizo el cielo y la tierra,
    el mar y todo lo que hay en ellos.
    Él cumple todas sus promesas para siempre.
Hace justicia al oprimido
    y da alimento al que tiene hambre.
El Señor libera a los prisioneros.
    El Señor abre los ojos de los ciegos.
El Señor levanta a los agobiados.
    El Señor ama a los justos.
El Señor protege a los extranjeros que viven entre nosotros.
    Cuida de los huérfanos y las viudas,
    pero frustra los planes de los perversos.

10 El Señor reinará por siempre.
    Él será tu Dios, oh Jerusalén, por todas las generaciones.

¡Alabado sea el Señor!

 

 

https://youtu.be/iPOhznXky-4?si=8asMDabcj9d_hTxK

 

Estimado lector:

 

Todo creyente debe alabar al Señor con honestidad, expresando amor, admiración, alegría y aceptación. La verdadera adoración no solo reconoce Su grandeza, sino que también lo engrandece a través de una vida íntegra. Está escrito que la oración debe ser constante, sin permitir que el enemigo interrumpa la comunión con Dios y cause una caída que aleje el espíritu del Creador.

Es fundamental ignorar cualquier influencia o actividad que desvíe del camino correcto, evitando participar en aquello que el mundo propone, pues está escrito: “Si se imita, de cierto se morirá”.

Ante situaciones difíciles, se debe buscar el gozo con fe en el Ayudador, quien, con Su Palabra, creó toda la existencia y siempre cumple lo prometido, liberando al oprimido y levantándolo.

El Señor protege a quienes establecen Su Reino en la tierra, recordando que aquí solo somos extranjeros debido a la ciudadanía celestial que poseemos. Él interviene para frustrar los planes del enemigo y asegurar la vida eterna en Su presencia. Por esto, la alabanza al Señor debe permanecer por siempre

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES