JESÚS, EJEMPLO DE LIDERAZGO

Noviembre 17 de 2025

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

JESÚS, EJEMPLO DE LIDERAZGO

MATEO 20:20-23

Jesús enseña acerca del servicio a los demás

20 Entonces la madre de Santiago y de Juan, hijos de Zebedeo, se acercó con sus hijos a Jesús. Se arrodilló respetuosamente para pedirle un favor.

21 —¿Cuál es tu petición? —le preguntó Jesús.

La mujer contestó:

—Te pido, por favor, que permitas que, en tu reino, mis dos hijos se sienten en lugares de honor a tu lado, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda.

22 Jesús les respondió:

—¡No saben lo que piden! ¿Acaso pueden beber de la copa amarga de sufrimiento que yo estoy a punto de beber?

—Claro que sí—contestaron ellos—, ¡podemos!

23 Jesús les dijo:

—Es cierto, beberán de mi copa amarga; pero no me corresponde a mí decir quién se sentará a mi derecha o a mi izquierda. Mi Padre preparó esos lugares para quienes él ha escogido.

 

https://youtu.be/t8nsXUm-pu0?si=gl6QXk1cJc7cdm3y

 

Estimado lector:

Este pasaje enseña que el liderazgo en el Reino de Dios se fundamenta en el servicio, no en el poder ni en la posición. Santiago y Juan, junto con su madre, se acercaron a Jesús con una petición movida por la ambición: querían sentarse a su derecha e izquierda en Su Reino. Sin embargo, Jesús les respondió que esa honra no dependía de Él, sino del Padre, y aprovechó el momento para enseñar un principio esencial del discipulado.

Les explicó que, a diferencia de los gobernantes del mundo, quienes ejercen autoridad con dominio y control, entre sus seguidores la grandeza se demuestra sirviendo. Quien desea ser el primero debe hacerse servidor de todos.

Jesús mismo es el modelo perfecto de este principio: como el Hijo del Hombre, no vino para ser servido, sino para servir y dar Su vida en rescate por muchos. Su ejemplo redefine el concepto de autoridad, mostrando que el verdadero liderazgo se expresa en la humildad, el sacrificio y el amor hacia los demás.

La grandeza en el Reino de Dios no se conquista buscando poder, sino entregándose al servicio de otros.

El llamado es a servir, tomando como referencia el ejemplo de liderazgo de Jesús

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES