Julio 01 de 2025
LA BONDAD DE UN CORAZÓN
AGRADECIDO
MATEO 6:1-4
Enseñanza acerca de dar
a los necesitados
6 »¡Tengan cuidado! No
hagan sus buenas acciones en público para que los demás los admiren, porque
perderán la recompensa de su Padre, que está en el cielo. 2 Cuando
le des a alguien que pasa necesidad, no hagas lo que hacen los hipócritas que
tocan la trompeta en las sinagogas y en las calles para llamar la atención a
sus actos de caridad. Les digo la verdad, no recibirán otra recompensa más que
esa. 3 Pero tú, cuando le des a alguien que pasa
necesidad, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha. 4 Entrega
tu ayuda en privado, y tu Padre, quien todo lo ve, te recompensará.
https://youtu.be/xHZDGLcMcxs?si=gJLm4qUxSVA49taD
Estimado Lector:
Jesús advierte sobre el
peligro de cultivar una imagen externa de justicia. Resulta difícil actuar
piadosamente en público sin pensar en cómo será percibido ese comportamiento.
En la época de Jesús,
era común que algunos llamaran la atención sobre sus donaciones con el fin de
ser reconocidos como generosos. Aunque hoy no se "toque trompeta"
literalmente al dar, todavía existen formas sutiles de proyectar una imagen de
generosidad para ganar prestigio o reconocimiento social.
El término “hipócrita”
proviene del griego hypokritēs,
que originalmente se refería a un actor de teatro. Con el tiempo,
fue usado para describir a quienes representaban un papel en la vida real,
aparentando ser algo que no eran. Así lo aplica Jesús
a quienes practican la justicia solo para ser vistos.
La advertencia es
clara: quienes hacen obras para obtener la aprobación de otros, ya han recibido
su recompensa en esta tierra. No habrá galardón en los cielos para quienes
actuaron únicamente con el fin de recibir reconocimiento humano.
Este llamado invita a
examinar las motivaciones del corazón. Las obras de misericordia deben hacerse
para agradar a Dios, no para ganar aprobación externa. La generosidad que nace
del amor a Dios añade fruto eterno, y no busca corona terrenal, sino el gozo de
ser hallado fiel.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”