Mayo 13 de 2025
La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.
UN
JUICIO QUE YA ESTÁ ESCRITO
SALMOS
149:7-9
7 para tomar venganza contra las
naciones
y castigar a los pueblos,
8 para encadenar a sus reyes con grilletes
y a sus líderes con cadenas de hierro,
9 para ejecutar el juicio que está escrito contra ellos.
Este es el privilegio glorioso que tienen sus fieles.
¡Alabado
sea el Señor!
https://youtu.be/Y8h85YD4ovE?si=uTVZ-6L1Xlky---y
Estimado
lector:
El
Salmo 149 es una invitación a los fieles a alabar al Señor con danzas,
instrumentos musicales y cánticos nuevos. Este himno celebra la grandeza de
Dios y destaca el gozo que Él encuentra en su pueblo, a quien protege como a un
tesoro precioso. Es una expresión de júbilo que reconoce la bendición de
pertenecer al Señor.
Más
allá de la alabanza, el salmo también presenta una dimensión de justicia
divina. Se menciona la ejecución de juicio sobre las naciones y los pueblos que
han actuado como opresores, generando sufrimiento al pueblo de Dios. Esta
"venganza" no debe interpretarse desde una perspectiva humana, sino
como un acto justo, decretado por Dios, en defensa de la verdad y la justicia.
La
imagen de reyes y nobles encadenados representa la caída de aquellos que,
amparados en su poder y riqueza, han perpetuado la injusticia. El juicio divino
es una promesa firme contra toda oposición a Dios y a su propósito, y es fuente
de esperanza y fortaleza para los justos.
El
salmo concluye con una afirmación poderosa: Dios usará a su pueblo como
instrumento de justicia en el cumplimiento de sus designios eternos. Esta
participación será parte de la gloria otorgada a todos sus santos, anticipando
la victoria final del bien sobre el mal.
Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.
¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele
Dios podría estar hablándole de Él
Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”
Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”