LA PALABRA DE DIOS ES EL CIMIENTO SEGURO

Julio 19 de 2025

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

LA PALABRA DE DIOS ES EL CIMIENTO SEGURO

 

MATEO 7:24-27

Edificar sobre un cimiento sólido

24 »Todo el que escucha mi enseñanza y la sigue es sabio, como la persona que construye su casa sobre una roca sólida. 25 Aunque llueva a cántaros y suban las aguas de la inundación y los vientos golpeen contra esa casa, no se vendrá abajo porque está construida sobre un lecho de roca. 26 Sin embargo, el que oye mi enseñanza y no la obedece es un necio, como la persona que construye su casa sobre la arena. 27 Cuando vengan las lluvias y lleguen las inundaciones y los vientos golpeen contra esa casa, se derrumbará con un gran estruendo».

 

https://youtu.be/m-eLxibV9QM?si=u0HH7ofuItznOxA9

 

Estimado lector:

Este pasaje presenta la parábola de los dos cimientos, en la que se establece una comparación entre quienes escuchan y obedecen las enseñanzas de Jesús, y quienes las escuchan, pero no las practican. El primero es representado por un hombre prudente que edifica su casa sobre roca; el segundo, por un hombre insensato que la edifica sobre arena.

Ambas construcciones enfrentan una tormenta, símbolo de las adversidades de la vida. La casa edificada sobre roca permanece firme, mientras que la construida sobre arena se desploma, lo que evidencia la solidez o fragilidad del fundamento sobre el cual se ha edificado.

La parábola subraya que la obediencia a las enseñanzas de Jesús constituye un fundamento firme y seguro. En contraste, la falta de obediencia equivale a levantar una estructura sobre bases inestables, lo cual conduce inevitablemente al colapso cuando se presentan pruebas.

El mensaje central reside en la importancia de los cimientos sobre los cuales se edifica la vida. La estabilidad y permanencia están directamente relacionadas con la práctica de las enseñanzas recibidas. Por tanto, esta parábola ilustra que solo una vida fundamentada en principios sólidos puede resistir las tempestades sin sucumbir.

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES