QUIEN NO ESTÁ CONMIGO ESTÁ CON SATANÁS

Septiembre 09 de 2025

La iglesia no cierra. Ahora más unidos, más cerca.

QUIEN NO ESTÁ CONMIGO ESTÁ CON SATANÁS

 

MATEO 12:30-32

30 »El que no está conmigo, a mí se opone, y el que no trabaja conmigo, en realidad, trabaja en mi contra.

31 »Por eso les digo, cualquier pecado y blasfemia pueden ser perdonados, excepto la blasfemia contra el Espíritu Santo, que jamás será perdonada. 

32 El que hable en contra del Hijo del Hombre puede ser perdonado, pero el que hable contra el Espíritu Santo jamás será perdonado, ya sea en este mundo o en el que vendrá.

 

https://youtu.be/qXOoMIRxyk8?si=5KlASb_fNzglTiaS

 

Estimado lector:

Jesús dejó en claro que no existe una posición neutral frente a su persona o su obra. Quien no está con Él, está contra Él; y quien no colabora con su misión, ya sea por oposición activa o por indiferencia, se sitúa en el lado contrario. En el mundo actúan únicamente dos fuerzas: la que reúne y la que dispersa; favorecer una implica contradecir a la otra.

El ministerio esencial del Espíritu Santo consiste en dar testimonio de Jesús (Juan 15:26). Rechazar total y definitivamente ese testimonio equivale a blasfemar contra el Espíritu, es decir, declarar falso su mensaje acerca de Cristo. Rechazar a Jesús por ignorancia o desde la distancia es grave; rechazar de manera consciente y deliberada el testimonio del Espíritu sobre Él es decisivo y fatal.

A veces, ciertas personas pronuncian, en tono de broma o desafío, palabras que consideran blasfemias contra el Espíritu, como si se tratara de un juego con la eternidad. Sin embargo, la verdadera blasfemia contra el Espíritu no se reduce a una fórmula verbal, sino que refleja una actitud persistente de vida que rechaza el testimonio del Espíritu Santo acerca de Jesús. Incluso quienes hayan proferido palabras imprudentes aún pueden arrepentirse, siempre que no exista un rechazo consciente y definitivo hacia Cristo.

Existen creyentes que, en algún momento, han sentido una gran angustia por temor a haber cometido el pecado imperdonable. No obstante, debe recordarse que nadie que reconozca la misión divina de Jesucristo puede incurrir en él.

 

4 pasos que te ayudarán a tener un tiempo con Dios.


Invite en oración a la presencia de Dios y pídale que su verdad le sean reveladas.

  1. Lea despacio
  2. Lea en voz alta
  3. Mientras esté leyendo pregúntele a Dios:

¿Señor qué me quieres decir hoy?
Permita que el Espíritu Santo le revele


Dios podría estar hablándole de Él

  1. ¿Quién es Él?
  2. ¿Cuáles son sus características?
  3. ¿Qué hará?

Dios podrá estar hablándole a usted. Reflexione en lo siguiente:

  • P ¿Será un PECADO que debo confesar?
  • A ¿Será una ACTITUD que debo adoptar?
  • M ¿Será un MANDAMIENTO que debo obedecer?
  • P ¿Será una PROMESA que debo reclamar?
  • E ¿Será un EJEMPLO que debo seguir o evitar?

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. Pida PERDÓN: Confiese su pecado, arrepiéntase y reciba el perdón de Dios
  2. De GRACIAS: Agradezca a Dios por sus muchas bendiciones y promesas
  3. Por FAVOR: Ore por sus necesidades y las de otros; salvación, sanidad, protección
  4. Finalice diciendo TE AMO. Termine este tiempo en adoración y alabanza

Ahora que ha permitido que Dios le hablara, hable con Él en oración.

  1. ¿Qué le habló Dios?
  2. ¿Cómo esto cambiará sus perspectivas?
  3. ¿Cómo aplicará esto en su vida diaria?

Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”

Santiago 1:22 “Mas sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos á vosotros mismos”

DEVOCIONALES